domingo, 22 de noviembre de 2009

Dormida bajo el árbol

Cuando camines por el río turbio
entenderás amor mio que no existe el azar
y ese árbol que ves allá
de pronto lo tendrás acá, a tu lado
te dirá que sigas aquella luz
sin pensarlo aceptarás, y partís
en busca de tu objetivo
ese inalcanzable abrigo que quema tu sien
y ahora estás siguiendo tu camino
rumbo a un mundo perdido
navegando en nuevas dimensiones
alterando el tiempo, creando lágrimas
descubrís que nada es como pensás
saltas al interior de una cueva asombrosa
lentamente abrís los ojos y ves
miles de imágenes atravesando tu mente
fugaces, efímeras, confusas, dicen más de lo que muestran
caés en un profundo sueño en el más hermoso lecho
y al despertar solo vos estás , sola allí frente a todo
todo y nada, nada de nada, nada de todo
eso que ves y que no ves (cosas que escapan a tu realidad)
sonreís al entender, sin saber por qué, que nunca despertaste
seguís durmiendo bajo ese árbol
y el miedo se apodera de vos
corres desesperadamente buscando salir
pero es tarde, solo el sol puedes sentir
y quedas ahí dormida en un sueño eterno
esperando que alguien te encuentre
y te diga que despiertes que es hora de irse
y así juntos caminar por el río turbio
hasta el fin de la humanidad
y así juntos vamos a caminar por el río turbio
hasta el fin de la humanidad

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